Marzo de 2019.- El 8 de marzo se estableció como Día Internacional de la Mujer en 1975 por mandato de la Asamblea General de las Naciones Unidas, con el objetivo de conmemorar la lucha de las mujeres por el ejercicio de sus derechos en igualdad de oportunidades y sin discriminación.
El Día Internacional de la Mujer es una importante ocasión para reflexionar acerca de los avances logrados en materia de igualdad entre los géneros, rendir homenaje a la valentía y determinación de las mujeres que han jugado un papel clave en la historia de sus países y comunidades, visibilizar las desigualdades aun existentes que marcan la vida de las mujeres, y exigir a los Estados la igualdad real entre hombres y mujeres.
El Estado Plurinacional de Bolivia ha ratificado los compromisos internacionales en materia de igualdad de género y empoderamiento de las mujeres y las niñas y ha impulsado medidas legislativas y de políticas públicas que han permitido importantes avances; asimismo se ha comprometido a alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que requiere cambios transformadores, enfoques integrados y nuevas soluciones, sobre todo en lo que concierne al ODS 5 dirigido al logro de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y niñas.
En este sentido, Naciones Unidas destaca la reciente conformación del Gabinete Especial de Lucha Contra la Violencia hacia la Mujer y la Niñez, y del Servicio Plurinacional de la Mujer y de la Despatriarcalización, y enfatiza la importancia de que ambos mecanismos cuenten con los recursos humanos y financieros suficientes para avanzar en la despatriarcalización, la igualdad entre los géneros y la eliminación de la violencia contra las mujeres.
No podemos, sin embargo, olvidar los desafíos, pues a pesar de esos importantes avances, los índices de violencia contra las mujeres continúan en aumento. Datos de la Fiscalía General del Estado evidencian que en Bolivia se han registrado 19 feminicidios en lo que ha transcurrido de 2019.
Asimismo, son altamente preocupantes los índices de violencia sexual a mujeres, niñas y adolescentes, perpetrados por hombres de sus propias familias, de la escuela y la comunidad, de manera individual e incluso grupal.
En cuanto al derecho a la salud de las mujeres y los derechos sexuales y reproductivos, el embarazo en adolescentes y el embarazo infantil son dos realidades crecientes que ponen en riesgo la salud y la vida de las niñas y adolescentes, representando el 14% de las muertes maternas en el país. Asimismo, son preocupantes los índices de malnutrición donde tres de cada 10 mujeres padecen de anemia, mientras que seis de cada 10 sufren sobrepeso u obesidad, situación que afecta su calidad de vida. En ese sentido y otros, el Seguro Universal de Salud es una medida de vital importancia para revertir estos indicadores y asegurar el acceso universal y gratuito a la salud de la población boliviana.
Por otra parte, aún existen desafíos para el acceso a igualdad de oportunidades, la corresponsabilidad en las tareas del cuidado, el cierre de la brecha salarial, el acceso a la titulación de tierras en condiciones de igualdad y el enfrentar las limitaciones culturales que impiden a las mujeres acceder a puestos de dirección y liderazgo, libres de acoso y violencia política.
En este 8 de marzo, Naciones Unidas se compromete a seguir trabajando de manera urgente y con toda su energía en la promoción de la igualdad de género, el empoderamiento de las mujeres y las niñas, la eliminación de la violencia debido a género, sin dejar a nadie atrás.
Fuente: Naciones Unidas