“Manos a la Obra” es el programa de Voluntariado interno de Itacamba S.A. que tiene como objetivo involucrar a sus colaboradores en la responsabilidad de la empresa para impactar en salud, educación y cuidado del medio ambiente.
El programa de voluntariado de la cementera denominado “Manos a la Obra” ejecutó proyectos en Santa Cruz y Puerto Suarez. Mediante esta actividad, la empresa involucra a su equipo en sus actividades de RSE, bajo el lema “la responsabilidad comienza en casa”.
“Manos a la Obra” es el programa de Voluntariado interno de Itacamba S.A. que tiene como objetivo involucrar a sus colaboradores en la responsabilidad de la empresa para impactar en salud, educación y cuidado del medio ambiente.
Se trata de un aporte en tiempo y talento de los colaboradores, quienes impactan en beneficio de la comunidad transformándose en agentes de cambio en el entorno.
En el marco de este programa se ejecutaron 2 acciones sociales enfocados en la educación. Los voluntarios trabajaron en la refacción 2 centros educativos, uno de ellos es la guardería del Barrio Marítimo en la Villa 1º de Mayo en Santa Cruz y el otro es la Guardería Municipal El Angel en Puerto Suarez.
En ambos casos se realizaron refacciones, limpieza profunda de los predios, trabajo de jardinería, lijado de paredes, pintado y decoración de las aulas; cambio en los pisos, revestimiento de paredes de la cocina, construcción de mesones, reconstrucción y revoque de paredes dañadas por la humedad, además de refacción de techos y baños.
Estas actividades se realizan durante el tiempo libre de los colaboradores quienes voluntariamente se inscriben en el programa “Manos a la Obra”, ya que la empresa busca incorporar en la vida de los colaboradores los principios y valores que sustentan a la organización.
De acuerdo con Edwin Ríos, Gerente de Gente y Gestión de la empresa, previo a la ejecución de estos proyectos, los voluntarios pasaron por un proceso de capacitación, tras el cual pudieron identificar proyectos para aportar con sus capacidades y talento. Fue así, que se seleccionaron estas dos guarderías que necesitaban apoyo para brindar una atención adecuada a los niños.
“Estamos orgullosos de aportar con nuestro granito de arena a nuestra comunidad y muy orgullosos que nuestra empresa nos dé esa oportunidad” manifestó Alejandra Araúz, colaboradora del área de Finanzas de Itacamba.
“Estamos agradecidos con nuestros colaboradores quienes han participado de este trabajo, poniendo al servicio de la comunidad su tiempo, talento y esfuerzo; es un orgullo ver cómo nuestro máximo valor que es la responsabilidad y el compromiso con el entorno se traduce en cada uno de nuestra gente”, indicó Karina Fernandez, encargada de Responsabilidad Social de la empresa.
Itacamba Cemento S.A. es reconocida por su buena reputación en el Ranking MERCO, donde está presente por 7 años consecutivos. De igual manera el instituto Great Place to Work Bolivia®, tambien la reconoce como uno de los mejores lugares para trabajar, y a inicios del 2022, se ha unido al Pacto Global aportando con proyectos enmarcados en 9 de los 14 objetivos de desarrollo.
5 años después de inaugurar su nueva fábrica, Itacamba lleva más de 100 proyectos de Responsabilidad Social ejecutados y se proyecta a fortalecer su gestión empresarial e industrial desde un enfoque sostenible.
Acerca de Itacamba Cemento S.A.
Itacamba Cemento S.A. es una empresa boliviana fundada en 1997. Posee la única Planta Integral de Cemento del Oriente Boliviano, ubicada en la localidad de Yacuses en Santa Cruz. Con sus productos, el cemento de uso general IF-30 y el cemento de uso estructural IF-40, cubre las necesidades del sector de la construcción de un país en crecimiento. Sus productos cumplen con la normativa NB-011 del Instituto Boliviano de Normas y Calidad (Ibnorca), además de otras normas internacionales como la de Argentina y Paraguay. Sus procesos de producción y comercialización están certificados con la norma ISO 9001:2015, lo que garantiza un resultado con los más altos estándares de calidad. La cultura de la innovación y eficiencia se aplica en todos sus procesos, en el marco de un involucramiento responsable con su entorno.