Su excelencia y la calidad son resultado del compromiso de la empresa con el cuidado de la salud de los bolivianos y su incesante trabajo por construir una sólida base de certificaciones, tanto nacionales e internacionales.
El 20 de septiembre de 1973, en la ciudad de La Paz, fue fundado COFAR; el laboratorio que nació con 19 trabajadores que, de la mano de un liderazgo empresarial, lo convirtieron en una corporación que hoy genera empleo para 750 personas, cuenta con más de 11 oficinas en toda Bolivia, y es el padre de Flavicold, Novadol y la línea para la salud de los ojos Vidiline.
“A lo largo de los años, COFAR pasó de tener 19 trabajadores comprometidos a convertirse en una corporación que brinda empleo a más de 750 personas en toda Bolivia, en 11 oficinas regionales. Esta expansión es una prueba de la dedicación de COFAR a su misión de ser la empresa más valorada del país, proporcionando soluciones terapéuticas para prevenir, aliviar y curar”, señala información de la industria orientada a la elaboración de medicamentos e insumos médicos.
La empresa, fundada por Leonardo Handal Katimi, destaca que en este medio siglo ha creado productos farmacéuticos que se han convertido en un ícono de la industria farmacéutica, y se encuentran entre los más valorados por médicos y clientes bolivianos, como Novadol, antigripal Flavicold y los colirios de la línea Vidiline.
“En un mercado altamente competitivo y dominado por empresas transnacionales, Corporación COFAR ha demostrado ser un líder. A través de su estrategia de marketing relacional, ha logrado la segunda posición en preferencia de los médicos bolivianos. Cabe destacar que esta posición se ha alcanzado sin publicidad en medios tradicionales bolivianos. Su éxito ha sido impulsado por relaciones sólidas entre su equipo comercial, la comunidad médica y sus clientes”, destaca información de COFAR.
Desde la corporación se indica que en este medio siglo de existencia, el trabajo y gestión estuvieron orientados a la excelencia en el cuidado de la salud de los bolivianos. De la misma forma – indican – el 50 aniversario de la corporación es una oportunidad para “renovar su compromiso con la entrega de productos farmacéuticos de calidad, brindando soluciones terapéuticas que impactan positivamente en la vida de las personas”.
Esa excelencia y calidad son resultado del compromiso de la empresa con el cuidado de la salud de los bolivianos y su incesante trabajo por construir una sólida base de certificaciones, tanto nacionales e internacionales.
No ha sido fácil llegar a este medio siglo de vida – expresan desde la corporación-; esto por las limitaciones con las que se encuentra la industria nacional frente a un mercado dominado por productos de importación, una economía de escala y los efectos que dejó la pandemia y la crisis sanitaria.
Sin embargo, al cumplir 50 años, la industria farmacéutica reafirma su compromiso de mantener su ritmo de crecimiento en Bolivia, expandir su infraestructura del área productiva y seguir mejorando en la calidad de sus nuestros productos, a través del desarrollo del personal y innovación tecnológica.
Tecnología y automatización
Este medio siglo de vida de la Corporación COFAR está marcado por su compromiso con la tecnología y la automatización; sus cartas de éxito para enfrentar los cambios y desafíos que trajeron la pandemia y la tecnología
“La Corporación COFAR ha abrazado la tecnología y la automatización para optimizar todos sus procesos, mejorando la experiencia de sus clientes y socios comerciales. Esta adaptación constante es un ejemplo de cómo la empresa responde a los cambios del entorno, incluso en tiempos de pandemia”, indica información del laboratorio.
La profesionalización de sus colaboradores, especializados en el manejo de tecnología de última generación, es el complemento estratégico con el que COFAR fortaleció su compromiso con la innovación. El resultado son los productos de calidad que produce y la optimización de todos sus procesos.
Líneas de negocios
La corporación remarca que parte de su estratégica de crecimiento pasa por la creación de tres unidades estratégicas de negocio. En primer lugar, está Breskot Pharma, que cuenta con más de 30 productos, entre los que destacan Novadol, Flavicold, Fixim, Espamo Loxadim Forte, Flexicam Procin Digest, Dolocofamin, Bonagel Plus y Trassil.
Vidiline, es la segunda unidad de negocio de la corporación que – asegura la empresa – lidera la industria nacional de colirios y productos para la salud visual
“COFAR es poder confiar”, es la tercera unidad estratégica de negocio de la industria, con la que ofrece al mercado boliviano medicamentos genéricos, “de altísima calidad a precios accesibles”.
Certificaciones
La Corporación COFAR está acreditada en todo el Sistema Integrado de Gestión con certificaciones en las siguientes normas ISO internacionales: ISO 9001 de Calidad; ISO 45001 de Seguridad y Salud en el Trabajo, e ISO 14001 de Medioambiente. Es un Laboratorio de Control de Calidad acreditado según NB-ISO/IEC 17025:2018 (DTA-CET-178).
A nivel nacional, COFAR cuenta con acreditaciones en Buenas Prácticas de Almacenamiento (BPA), Buenas Prácticas de Manufactura (BPM) y la Certificación OEA (Operador Económico Autorizado), otorgada por la Aduana Nacional de Bolivia, que convierte a la corporación en un Operador Económico Autorizado, tanto para Bolivia como para el mundo.
“Estas certificaciones y acreditaciones reflejan el compromiso con la excelencia en el comercio internacional, la cadena logística y la calidad de sus productos”, afirman desde la Corporación COFAR.