Más de 75 jóvenes hombres y mujeres culminaron con éxito el proyecto «Consolidar la cadena de valor apícola liderada por las comunidades del Chaco». Este esfuerzo no solo empoderó a mujeres y hombres en tres comunidades de la región, fortaleciendo sus capacidades locales, sino que también logró la protección de 3000 hectáreas de bosques, esenciales para los polinizadores, sentando las bases de un modelo de desarrollo económico y sostenible.
El impacto del proyecto no solo se mide en cifras, gracias a las capacidades generadas y al equipamiento proporcionado, los beneficiarios ahora cuentan con herramientas más sólidas para avanzar en el proyecto y abrirse a nuevos mercados, como ferias locales, puntos de venta regionales y potenciales acuerdos con distribuidores nacionales. Jaime Díaz, beneficiario del proyecto apícola en Cortaderal, destacó el impacto social de la iniciativa: “Algo que nos ha ayudado como comunidad es que nos ha unido, es un proyecto que nos ha acercado a toda la comunidad”.
Este resultado para los comunarios es una iniciativa de la Fundación Natura Bolivia, que es posible con el apoyo del Banco de Desarrollo Productivo (BDP-programa Huella Verde, en el marco de su mecanismo de Responsabilidad Social Empresarial. Ambas instituciones ratificaron su compromiso de seguir trabajando en proyectos que combinen conservación ambiental y desarrollo económico, demostrando que es posible construir un futuro sostenible para el Chaco y sus emprendedores.