#Jannett Oporto V.-En noviembre del 2018 la Universidad Católica Boliviana (UCB) dio a conocer los resultados de la “Encuesta de Valores Sociales y Políticos”, entre otros datos, se destacó que los millennials bolivianos tomaban distancia de la política, solo para el 14,9% era algo “muy importante”, para el 47.5 % la política era algo “No muy importante”.
Para el 47,5% la política era algo “no muy importante, el 27,7% la calificaba de “algo importante”, el 14,9% la consideraba “muy importante” y el 9,6% “nada importante”.
Un año después y luego de conocer los resultados de las elecciones generales realizadas el 20 de octubre de 2019, la realidad muestra una situación muy diferente. Son los jóvenes, lo millennials, los de la generación del 2025, quienes están en las calles y son miles los que están con la tricolor en mano, en la espalda, como cintillo en la cabeza, interpelando a viva voz al sistema y exigiendo –desafiantes- respuestas, porque no los han escuchado, no los conocen y no saben cómo piensan.
No tienen partido político pero quieren ser escuchados, por eso reclaman políticas en temas tan sensibles como el agua, la salud, la educación, el trabajo, la inclusión y el respeto al medio ambiente.
Los millennials son los actores de HOY, son los que tienen acceso a mucha, mucha información, son los tecnológicos, los que se comunican por la redes sociales, a través de emojis, hashtags, selfis y memes, son los que tienen sus archivos en la nube y son los sedentarios, son también los más sensibles con el cambio climático, no le temen a cambiar de empleo, tampoco les interesa permanecer en uno hasta jubilarse. Son emprendedores, quieren ser su propio jefe.
Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas, son el 41 % de la población. Muchos de ellos votaron por primera vez el pasado 20 de octubre, la mayoría en Bolivia no conoce a otro presidente que no sea Evo Morales. De los casi 7 millones de bolivianos habilitados para votar, en las últimas elecciones, los millennials representan en el Padrón Electoral el 46%; son los ciudadanos entre 18 y 35 años. Son la población Activa y, en esta coyuntura de movilizaciones, post elecciones, son los que le están poniendo su sello al decir aquí estamos.
Entonces, lo que está claro, es que no habían estado tan ajenos a la política. Estaban mirando con atención cómo se están abordando algunos de los temas que les preocupa. Si bien no tienen partido político, cuando los millennials hablan con los medios, dejan claro que quieren ser escuchados, que se los tome en cuenta.