Las mujeres somos más menos 50% de la población mundial, si esta mitad no participa de forma activa, genuina y en igualdad de condiciones no existirá un desarrollo sostenible, no hay futuro y tampoco hay futuro para las empresas, por eso es necesario contribuir a cerrar las brechas que son evidentes en los ámbitos de la educación, en términos de salarios, y en la toma de decisiones. Las mujeres no estamos en lugares donde se toman decisiones.
Teresa Pérez del Castillo, Coordinadora Regional del Programa Ganar- Ganar de ONU Mujeres en Argentina, afirmó -a manera de incentivo para poner en acción buenas prácticas- que “la equidad de género dentro de las empresas es un buen negocio”.
La afirmación la realizó en el marco del evento organizado por la Mesa de Género del Pacto Global Bolivia “Empresas comprometidas con la igualdad de género” que permitió visibilizar las buenas prácticas que están implementando las empresas privadas bolivianas.
En su exposición, Pérez del Castillo mencionó que hay estudios que dan cuenta que el 90% de los trabajos en el mundo se encuentran en el sector privado; que la igualdad de género es un tema de desarrollo sostenible, por tanto, acelerar la incorporación de esta mirada debe constituirse en una prioridad.
“La igualdad de género es transversal a toda la agenda de desarrollo sostenible, esto quiere decir que -sin igualdad no hay futuro, no hay desarrollo, no hay sostenibilidad-” y complementó indicando que las mujeres somos más menos 50% de la población mundial, “si esta mitad no participa de forma activa, genuina y en igualdad de condiciones no existirá un desarrollo sostenible, no hay futuro y tampoco hay futuro para las empresas”, sentenció.
El desafío de cerrar las brechas.-
La expositora señaló que cerrar las brechas, que están comprobadas con varios estudios, es el principal desafío considerando que se trata de un tema de justicia y de derechos, pero fundamentalmente es una mirada inteligente debido a que está comprobado que la igualdad y la diversidad afecta de forma positiva al negocio y por tanto al desarrollo sostenible.
“Una imagen vale más que mil palabras”.-
Las brechas de la participación de la mujer son evidentes en los ámbitos de la educación, en el trabajo no remunerado, en términos de salarios, y también la posición de mujeres en lugares de decisión. Como muestra la fotografía, “las mujeres no estamos en los lugares de decisión, en 2017 yo pienso que Ángela Merkel se vistió de rojo para la reunión del G20, para distinguirse entre tantos varones”.
Dicho esto, mencionó que las empresas privadas, que según algunos estudios, son generadores del 90% de los empleos, juegan un rol protagónico en ser parte de cambiar este panorama y de cerrar estas brechas.
Acelerar este proceso dijo “es una decisión inteligente” dado que está comprobado que la igualdad y la diversidad en general afecta de forma positiva a los negocios y por ello Naciones Unidas trabaja desde hace 11 años con herramientas para contribuir y promover la igualdad de género en el ambiente de trabajo, en el mercado y en las comunidades.
Impactos financieros y no financieros.-
Un estudio realizado este 2021 por ONU Mujeres revela los impactos de la igualdad de género en tres ámbitos:
Macroeconómico.-
– Estabilidad y seguridad a nivel nacional.
– Impacto financiero positivo a nivel mundial: crecimiento del PIB y solución para el envejecimiento de la población activa.
– Las mujeres aportan diferentes perspectivas, lo que mejora la productividad la eficiencia y, en consecuencia, aumenta el PIB.
– Algunos estudios han señalado las relaciones causales entre la equidad salarial y los indicadores de desarrollo humano.
Financiero.-
– Ejecutivo/as vinculan la diversidad de género con un mejor desempeño financiero, pero no traducen esta percepción en acciones estratégicas.
– Vínculo entre diversidad y la mejora en el desempeño comercial en una variedad de métricas financieras, que incluyen EBIT, EBITDA y ROE.
– Las organizaciones con más mujeres en los comités ejecutivos y en puestos de liderazgo se desempeñan mejor que las empresas con menos diversidad de género.
– Las mujeres en puestos de toma decisiones generan un mayor retorno de la inversión
– Comienzan a aparecer los fondos de inversión para empresas que cuentan con políticas de inclusión de mujeres.
Intangibles.-
– KPI positivos sobre reputación, facturación, innovación, retención de talentos, productividad y desempeño de las empresas.
– Mayor valor, ya que una empresa diversa se acerca a las características demográficas de los/las consumidores/as.
– La diversidad aumenta la complejidad de las relaciones dentro de las organizaciones. Estas son dinámicas sociales intransferibles, por lo tanto, difíciles de limitar.
– El liderazgo diverso puede garantizar el crecimiento empresarial en un entono volátil.
– El marketing en torno a cuestiones de género puede ayudar al crecimiento de las marcas y los estereotipos en la publicidad y la publicidad sexista tiene un impacto negativo en el comportamiento del consumidor.